FICHA DEL LIBRO:
Título: LA REBELIÓN DE LOS BUENOS
Autor: Roberto Santiago
Editorial: Planeta
ISBN: 978-84-08-27578-7
Precio: 21,75 €
Érase una vez un libro
escrito por Roberto Santiago (Madrid, 1968), un destacado autor, director de
cine y dramaturgo español. Su carrera abarca cine y literatura, dirigiendo
cortometrajes y películas reconocidas, como "El penalti más largo del
mundo" (2005) y "El club de los suicidas" (2007). En literatura,
ha ganado premios como El Barco de Vapor y es conocido por la exitosa serie
juvenil "Los Futbolísimos". Su primera novela para adultos,
"Ana" (2019), recibió reconocimiento, y en 2023 fue galardonado con
el Premio Fernando Lara por "La rebelión de los buenos". Además,
inició el proyecto "SUPERHÉROES" (2021), un multiverso literario. Su
amplia contribución le valió el Premio Cervantes Chico.
Érase una vez un libro que
comienza con una cita reveladora de Edmund Burke: "Para que el mal triunfe,
solo es necesario que los buenos no hagan nada". Esta idea permea a lo
largo de toda la trama, sugiriendo que tal vez la tendencia humana a no
rebelarse contra las injusticias permite que el sistema nos subyugue y nos
engañe, como si tuviera vida propia. Sin
embargo, la realidad nos indica que la única manera de enriquecerlo es
desafiándolo, alzándonos para mejorarlo y enfrentándonos para cambiar las
circunstancias. Son precisamente esos "buenos" mencionados por Burke
los que justifican el título de la novela, que a su vez toma forma cuando a
raíz del juicio al que asistiremos de la mano de Roberto Santiago se creará un
movimiento -promovido por los afectados a un medicamento- con base en Alemania
llamado “Die Rebellion der Guten” (La Rebelión de los Buenos).
Érase una vez un libro
cocinado a fuego lento, con paciencia y maestría, un thriller judicial que se
erige como un referente dentro del género, donde el lenguaje jurídico,
incluidas leyes o términos legales, no resulta abrumador para aquellos que no
somos expertos en la materia; más bien, las denuncias, sentencias o la jerga
legal que encontramos entre sus páginas mantienen al lector comprometido,
evitando desconectarlo de la trama. El autor, evidenciando un profundo
conocimiento del terreno legal, logra presentarlo de manera accesible,
manteniendo la verosimilitud a lo largo de toda la historia.
Érase una vez un libro
cuya trama comienza cuando Fátima Montero, dueña de uno de los holdings
farmacéuticos más influyentes globalmente, busca la ayuda del intrépido abogado
Jeremías Abi para gestionar su millonario divorcio. Movida por la indignación
al descubrir que su esposo y socio mantiene una relación con una menor de edad,
de la que se ha enamorado, su único deseo es arruinarle la vida. Sin embargo,
detrás de esta solicitud se esconde algo más siniestro. Abi, que también ha
sido víctima de engaños por parte de su exmujer y viviendo bajo amenazas
constantes, descubre prácticas ilegales escalofriantes en los métodos de la
compañía farmacéutica: experimentos con seres humanos, extorsiones, chantajes y
estafas. Aunque el ocaso de la ruina se cierne sobre el bufete, su sed de justicia supera todos los límites
y, con determinación inquebrantable, están dispuestos a desafiar a la
multinacional y, en particular, a su presidenta, sin importar las consecuencias
que esta osadía pueda traer consigo.
Érase una vez un libro que
abarca un amplio espectro, en el que se despliega un universo estremecedor donde
confluyen todos los elementos posibles; nos convertimos en testigos directos de
corrupciones monumentales, traiciones, prevaricaciones, sobornos, entramados
mafiosos, tráfico ilícito de armas, así como de influencias y crímenes que
conforman la esencia de toda novela negra y criminal. "La rebelión de los
buenos" no escatima en la trama, sumergiéndonos en un intrincado escenario
donde se suceden numerosos asesinatos y varios intentos frustrados. Un ejemplo
notable es el incidente al que yo he denominado “la boda roja”, porque al igual
que en “Juego de tronos”, se produce una masacre innecesaria que culmina con
Jeremías postrado en la cama de un hospital, atrapado en un coma aparentemente
irreversible, marcando un giro crucial en la historia.
Érase una vez un libro
fascinante en el que aparte de que el epicentro de la trama gire en torno a la
farmacéutica Montero-Meyer y el proceso que se despliega contra ella, otras
líneas narrativas se abren paso para capturar nuestra atención con una fuerza
irresistible. Se trata de las relaciones de Jeremías con su padre y sus hijas,
que se revelan como subtramas igualmente
cautivadoras, agregando capas de complejidad emocional a la materia principal, así
como la historia particular de Trinidad Bardot, un personaje cuya historia
personal se entrelaza de manera intrincada con el desarrollo general de la
trama. La travesía de Trinidad se convierte en un elemento clave, tejiendo una
red de intrigas que elevan la historia a un nivel superior de profundidad, al
convertirse en un personaje clave en el desarrollo de la historia, por lo que
la suma de estos factores contribuye a que las más de 700 páginas de la obra se
lean con una fluidez impresionante, manteniéndote cautivo en un viaje literario
que resulta tan entretenido como adictivo.
Érase una vez un libro que
despliega sus páginas con protagonistas excepcionales, personajes cuya complejidad
los convierte en seres inolvidables y perfectamente delineados. En un rincón de
esta trama apasionante se encuentra Jeremías Abi, un hombre audaz que, a sus
cuarenta y nueve años, mantiene su imprudencia, violencia y astucia en
equilibrio perfecto, revelando un carácter con un fondo extraordinariamente
positivo. A su lado, emerge Trinidad Bardot, conocida como "la
Sucesora", título otorgado por Abi y sus colegas en el modesto bufete de
Carabanchel Bajo que lidera. Trinidad es una mujer con un pasado enigmático que
se revela gradualmente, mostrando una valentía inquebrantable y una lealtad
admirable. Por otro lado, se presenta el matrimonio Montero-Meyer,
representantes de la octava farmacéutica más grande del mundo, con una
impresionante facturación anual de aproximadamente quince mil millones de
euros. Fátima Montero, una mujer implacable y sin escrúpulos, ha vivido toda su
vida en la opulencia, rodeada de privilegios desde su infancia. En
contrapartida, Niklaus Meyer es un vividor inestable al que la fortuna también
favoreció, otorgándole su posición actual. La narrativa se entrelaza con estas
intrigantes figuras, creando una historia llena de matices y giros que prometen
cautivar al lector en cada página.
Érase una vez un libro que no solo cuenta con unos protagonistas fascinantes, sino que también
deslumbra gracias a un elenco de personajes secundarios impagables y
excepcionalmente variado. Estos personajes, llenos de matices y contradicciones
que transitan por diversas tonalidades de gris, están magistralmente construidos.
Desde los integrantes del bufete, como Dolores García Pueyo (segunda madre de
Abi y confidente desde su infancia), los abogados Ana María Osés y Jon Uriburu,
hasta otros personajes como Pablo Barros (esposo de Dolores), la visitadora
médica Marta Praena, cuya intolerancia al agua tiene su punto y, adentrándonos
en la vida personal del protagonista, encontramos a Milagrosa (esposa de Abi),
Juana Gómez-Soto (exmujer, actualmente casada con Felipe "El
Cochambroso"), sus hijas Luna y África, y su padre, Jeremías Abi I, quien
a sus ochenta y tres años se enfrenta a la esclerosis lateral amiotrófica
(ELA). En otro plano, se encuentran la fiscal Rocío García Soto, una mujer
excepcionalmente tímida pero dotada de una observación aguda y dedicación
incuestionable, aunque carece de habilidades elocuentes. La jueza Neira
Paredes, por otro lado, se presenta como una mujer tranquila, opuesta a los
aspavientos y la teatralidad, comprometida con una justicia seria y libre de
artificios durante los juicios que preside. Y, en el extremo opuesto, figura
Adolfo Oriol de Villanueva, conocido como "El Duque", abogado
defensor de los Montero-Meyer y propietario del bufete más suntuoso y exclusivo
de la capital. Cada uno de estos personajes, con su singularidad y complejidad,
contribuye a tejer una trama rica en detalles y giros que prometen envolver al
lector en un mundo de intriga y drama,
En definitiva, érase una
vez un libro que no solo nos sumerge en las procelosas aguas del suspense y la
acción, sino que también despliega ante nosotros un agudo lienzo que retrata la
sociedad contemporánea con sus desafíos y rivalidades. De la pluma de Roberto
Santiago brota una reflexión sobre el valor o el precio (no tengo claro que
término aplicar) de la justicia, instándonos a explorar los confines que
estamos dispuestos a atravesar en la defensa de nuestros ideales más profundos.
Esta novela, sin duda, se erige como un poético llamado a la rebelión contra la
indiferencia y el letargo en un mundo donde, con demasiada frecuencia, los
intereses crematísticos eclipsan la esencia ética y humana.