Érase una
vez un libro escrito por una mujer nacida en Jodhpur (India) y criada a caballo entre su país de
origen y el de adopción: Estados Unidos, al que llegó con tan solo nueve años.
Una mujer que estudió Literatura en la Universidad de Stanford y que más tarde obtuvo
un máster en el California College of Arts. Durante más de tres décadas trabajó
en la agencia de publicidad que abrió tras terminar sus estudios y, tras
participar en distintos talleres narrativos, decidió lanzarse a escribir su
primera novela. Su debut tuvo un éxito arrollador, ya que enseguida entró en el
ránking del New York Times en los primeros puestos de los libros más vendidos.
Hablamos de La artista de henna.
Érase una
vez un libro incontestable, de los que te remueven el alma, de los que dejan
huella. Un libro que nos habla de amor en todas sus acepciones, también de
amistad, de lealtad, pero sobre todo de supervivencia, de lucha, de lo
complicado que lo tienen las mujeres en todas las latitudes y en particular en
países como la India en donde todavía son poco más que objetos o monedas de
cambio, da igual a la casta que pertenezcan.
Érase una
vez un libro con unos personajes de lo más carismáticos y que, sin embargo,
podrían parecer personas normales porque hasta sus imperfecciones los
humanizan. Es cierto que cuenta con una protagonista excepcional: Lakshmi
Sastri, una mujer que al empezar la novela tiene poco más de treinta años, pero
que carga en su alma con heridas que todavía no han cicatrizado y que quizás
nunca lo hagan. Cuando tan solo contaba con diecisiete años tuvo que huir con
lo puesto de un marido maltratador. No se arredró y se buscó la vida. En la
actualidad es una artista de henna y tiene acceso a la sociedad más elitista de
Jaipur debido a sus buenas artes. Solo busca una independencia económica que se
permita salir adelante y está a punto de lograrlo. Aparece entonces su hermana,
Rhada, de trece años, de la que ni siquiera conocía de su existencia para
desbaratarle la vida y también asoma la sombra de su marido, para enturbiarlo
todo un poco. En contraprestación tiene a su lado a su fiel Malik, un muchacho
al que rescató de un futuro incierto y que es su ayudante. Obviamente, hay
muchos más personajes, a cual más interesante, porque en este novela hasta los
secundarios son interesantísimos.
Érase una
vez un libro cuya trama en va envolviendo desde las primeras páginas. Nada en
ella es gratuito y te permite ver, oler, tocar, escuchar, tocar e incluso
degustar un país rico en tradiciones, culturas, religiones, nos gusten o no,
exótico y diferente. Escrito con un estilo directo, amable e irresistible.
Érase una
vez un libro que no puedo dejar de recomendar, por todas las razones que os he
contado y por muchas otras, porque se lee en un suspiro y te acerca un poco más
a un mundo que no conocemos tanto como creemos.